El juego nos invita a salir de nuestra “zona de confort” para llevarnos a la “zona de aprendizaje”. Allí es donde podemos descubrir nuevas capacidades que no imaginábamos que pudiéramos adquirir. Hay que animarse a entrar en el juego para que nazcan cosas nuevas.
Si queremos destacarnos tendremos que invertir muchas horas practicando. Muchas veces los prejuicios nos frenan antes de intentar jugar a un juego nuevo. Pensamos que no es para nosotros, que somos torpes o que no tenemos las competencias para hacerlo bien.
Se pueden utilizar juegos para descubrir talentos, para selección de personal y el desarrollo de las personas y de los grupos. Evaluaciones de talento como las que realiza la plataforma de Accelium permite evaluar habilidades cognitivas, trabajo bajo presión, rapidez del pensamiento, enfoque, visión sistémica, planificación, manejo del tiempo y de los recursos y pensamiento flexible.
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